Los tsunamis son un fenómeno aterrador

Han causado la pérdida de numerosas vidas, destruido viviendas y desmantelado comunidades en todo el mundo.

Los tsunamis son una serie de olas enormes que suelen iniciarse a partir de terremotos en el fondo o cerca del océano. También pueden ser causados por erupciones volcánicas, deslizamientos de tierra submarinos, desprendimientos de rocas costeras o incluso el impacto de un gran asteroide.

¿Sabías que la palabra "tsunami" combina las palabras japonesas "tsu" (puerto) y "nami" (ola)?

No pueden predecirse y a menudo llegan con muy poco aviso.

El primer signo es que el mar comienza a retirarse. Después, olas de hasta 30 metros de altura y velocidades de más de 800 kilómetros por hora irrumpen en la costa.

Más del 70 % de los tsunamis registrados se han localizado en el océano Pacífico, en torno a una zona proclive a los terremotos conocida como el "anillo de fuego del Pacífico".

El devastador tsunami en el océano Índico de diciembre de 2004 causó aproximadamente 227.000 muertes en 14 países. Fue originado por un terremoto submarino con potencia equivalente a 23.000 bombas atómicas y se conoce como el tsunami más mortífero de las últimas décadas. Indonesia, Sri Lanka, la India y Tailandia fueron los países más afectados.

En la región de Asia y el Pacífico, miles de personas han perdido la vida a causa de los tsunamis. La falta de conocimientos, sensibilización y preparación han contribuido al número significativo de muertos y heridos.

Children evacuate the school
PNUD Islas Salomón / Frederick Osifelo

Mejor prevenir que lamentar

En alianza con el Gobierno del Japón, desde el 2017, en el PNUD hemos trabajado con más de 520 escuelas en 24 países de Asia y el Pacífico mediante la iniciativa regional Tsunami Project. Esta iniciativa ha permitido a las escuelas evaluar los riesgos de un tsunami, diseñar procedimientos de emergencia y planes de evacuación, realizar simulacros y organizar campañas de concientización.

Solo en 2017, más de 100 escuelas y 60.000 personas participaron en simulacros. Hasta el 5 de noviembre de 2024, más de 218.000 estudiantes, docentes y funcionarios locales habían formado parte de estos ejercicios. En algunas escuelas, los simulacros se adaptaron para incluir a estudiantes con discapacidades. Se hicieron esfuerzos para concientizar no solo a los estudiantes, sino también a los docentes, al personal escolar y a las comunidades locales. Estas iniciativas para fortalecer la preparación de las comunidades garantizan que las personas puedan actuar rápidamente cuando llegue el próximo tsunami, salvando así vidas.

El proyecto ha elaborado una guía regional de preparación para las escuelas ante los tsunamis con el objetivo de ofrecer consejos prácticos sobre cómo prepararse y responder ante riesgo de tsunamis.

El proyecto también ha desarrollado una aplicación móvil, STEP-A, que permite a las escuelas evaluar su nivel de preparación ante este tipo de fenómenos. STEP-A se ha integrado en el sistema InaRISK (la plataforma geoespacial digital nacional de Indonesia) para garantizar que las autoridades nacionales y locales puedan acceder a los datos de preparación, contribuyendo así a una mejor gestión del riesgo de catástrofes.

El proyecto se centró en las comunidades costeras más vulnerables de 24 países: Bangladesh, Camboya, Fiji, la India, Indonesia, Kiribatis, Malasia, Maldivas, Micronesia, Myanmar, el Pakistán, Palau, Papua Nueva Guinea, Filipinas, la República de las Islas Marshall, Samoa, las Islas Salomón, Sri Lanka, Tailandia, Timor Leste, Tonga, Tuvalu, Vanuatu, Palau y Viet Nam.

Codo a codo

Las comunidades y los gobiernos locales se han mostrado como aliados entusiastas e innovadores.

En Fiji, los ejercicios pusieron a prueba la aplicación móvil GeoBing, que ofreció información en tiempo real para la detección temprana, allanando el camino para el primer simulacro nacional de tsunami.

En Samoa se utilizaron cascos de realidad virtual para preparar a los niños para los simulacros, con el fin de que supieran cómo sería su entorno bajo el agua.

Y en Bali, Indonesia, ocho hoteles se inscribieron como zonas seguras en situaciones de emergencia de tsunami, pasando de la preparación escolar a la de toda la comunidad.

En el Pakistán, los ejercicios se combinaron con limpieza de las costas para resaltar la importancia del medio ambiente en la preparación ante las catástrofes.

En Tailandia, más de 240 escuelas en áreas propensas a tsunamis elaboraron planes de evacuación y realizaron simulacros, en colaboración con la Oficina de la Comisión de Educación Básica, el Departamento de Prevención y Mitigación de Desastres y la Cruz Roja Tailandesa.

En Myanmar, se instruyó a los estudiantes mayores para que cuidaran de los más jóvenes durante las evacuaciones.

“Nosotros solo conocíamos la palabra 'tsunami'. Tras el simulacro de hoy, ya sabemos cómo reaccionar y responder en caso de desastre. Nos ofrecieron formación sobre qué hacer en caso de una lesión”.

— V. Manesha, Sri Lanka

Simulacros de evacuación en distintos países

  • PNUD Samoa
  • PNUD Maldivas
  • PNUD Islas Salomón
  • PNUD Tailandia / Pakin Media
  • PNUD Filipinas
  • PNUD Filipinas
  • PNUD Indonesia
  • PNUD Filipinas
  • PNUD Filipinas
  • PNUD Camboya
  • PNUD Pakistán / Mishal Jawaid
  • PNUD Papúa Nueva Guinea / Kim Allen

"El Japón ha sufrido innumerables catástrofes naturales y se ha recuperado. Esto es vital. Es nuestra responsabilidad compartir estas experiencias y conocimientos con todo el mundo, y salvar tantas vidas como sea posible", explicó Satomi Okagaki, exdirectora adjunta principal de la División de Cooperación sobre Asuntos Mundiales del Ministerio de Relaciones Exteriores del Japón.

En este país, todos los escolares saben qué hacer en caso de tsunami.

"Esperamos que este proyecto sea un buen punto de partida para arraigar la sensibilización y preparación, así como los ejercicios de evacuación en caso de tsunami", agregó Okagaki.

En la preparación ante un peligro natural, mientras más personas participen, mejor. Después de la trágica experiencia del tifón Haiyan en 2013, el más devastador en la historia de las Filipinas, padres y cuidadores estuvieron dispuestos a participar en los ejercicios. Allí se constató la importancia de aliarse no solo con el Departamento de Educación local, sino también con la comunidad en su conjunto, y definir con claridad los roles y los canales de comunicación. 20 escuelas y 20.000 personas participaron en los ejercicios.

Listos para actuar

Existe un poderoso elemento de desigualdad asociado a los peligros y catástrofes naturales, como los tsunamis. Estos afectan de manera desproporcionada a las naciones más pobres, a las mujeres y a los niños. Hasta un 80 % de las muertes causadas por el tsunami del océano Índico fueron mujeres y niños.

Para 2030, el mundo tendrá que hacer frente a unas 560 catástrofes ambientales al año, lo que empujará a 37,6 millones de personas más a la pobreza extrema, según las proyecciones actuales de la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR por sus siglas en inglés). Las inversiones en preparación no solo salvan vidas, sino que también reducen los costos de recuperación.

Este proyecto regional es parte de los esfuerzos de apoyo del PNUD para implementar el Marco de Sendái para la Reducción del Riesgo de Desastres, una iniciativa mundial para colaborar con los gobiernos locales con miras a la reducción del número de muertes, lesiones y daños económicos causados por los peligros naturales o creados por el hombre, y evitar que se conviertan en catástrofes.

Entre 2024 y 2025, en el PNUD ampliaremos nuestros esfuerzos ayudando a los países a integrar la preparación ante tsunamis en las políticas nacionales y en los planes de estudio de las escuelas, con el objetivo de empoderar a todos los centros educativos y comunidades para que reduzcan los riesgos y aumenten su seguridad en caso de un tsunami.

“Hemos aprendido bien a ayudar a preparar a nuestros alumnos, y sabemos cómo conducirlos a un lugar de evacuación seguro. Incluiremos estos aprendizajes cuando diseñemos los programas de planificación escolar futuros”.

— Daw Aye Mon Kyi, maestra auxiliar de Myanmar

Preparación de las escuelas de la región Asia-Pacífico

(Datos de noviembre de 2024)

218 000

alumnos, maestros y miembros de la administración escolar han participado en los simulacros

520

escuelas han impartido formación sobre tsunamis, desarrollando planes de evacuación y simulacros

24

países han participado

La realización de un simulacro requiere preparación y conocimiento del entorno, zonas de evacuación y formas de mantenerse seguros. Las decisiones tomadas en los minutos inmediatamente anteriores a la llegada de un tsunami pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte.

La experiencia es clara: la preparación salva vidas. Miles de niños en edad escolar que viven en zonas costeras de la región de Asia y el Pacífico aprenderán a través de los simulacros. Cuando se les enseña a los niños, ellos comparten lo aprendido con los demás.

Para más información sobre Tsunami Project, consulta